Li Cunxin (Chi Cao) es un bailarín chino que fue separado de su familia a los 11 años para iniciar su entrenamiento como bailarín de ballet. Después de muchos esfuerzos, en una China comunista y cerrada al mundo extranjero la escuela de Li recibe la visita del reconocido director del Houston Ballet, Ben Stevenson (Bruce Greenwood), quien ve en Li una capacidad tan grande que logra convencer al gobierno chino de llevarlo por tres meses como estudiante de intercambio a América. La entrega de Li en los ensayos provocaran que se convierta en el bailarín principal de la compañía, durante su estancia se enamorara de Elizabeth (Amanda Schull) con quien posteriormente se casara para poder permanecer en América pero el gobierno chino le prohibirá regresar a su hogar natal. Tras varios años los padres de Li tendrán la oportunidad de ver a su hijo interpretar un show de ballet con el cual Li lograra reunirse con sus padres que no ve desde su infancia, consiguiendo que el gobierno chino le permita visitar una vez más su país natal.
Una cinta tan conmovedora que logra sacarnos las lagrimas desde un principio, Mao’s Last Dancer es una historia acerca de ballet, pero sobre todo de superación, de valores y de pasión por lo que uno ama hacer. La historia de Li, una historia verídica, nos toca el corazón con cada movimiento que vemos en pantalla, las coreografías están llenas de emociones además de tener una serie de pasos que dejan ver la gran capacidad del coreógrafo. Tomando como base el ballet tradicional MLD nos deja ver la gran diferencia entre las ideas comunistas de china y el liberalismo de EUA por medio de cada número que tenemos en pantalla.
Chi Cao se transforma completamente en Li, entregando todo de si en cada escenas donde podemos ver el miedo y la inocencia de un joven que jamás a salido de su país cambiando sus ideas al estar en contacto con la forma de vida americana, a su vez vemos a un Li lleno de soledad y tristeza al no volver a ver a sus padres, una separación que marca su vida. Sin duda alguna este actor logró apoderarse de tal manera de Li que cumple con las expectativas que tenemos puesto que además de ser un gran actor, es un bailarín profesional. El resto del elenco no se queda atrás cada personaje tiene una función fundamental en la vida de nuestro protagonista y la representan de manera correcta. Mao’s Last Dancer no es otra cinta de baile que trata de copiar la historia de Billy Eliot, si no una historia que te emociona dejándote ver la forma en la que se vivía en esa época en ambos países, conociendo una de esas historias de vida extraordinaria que pocos saben que existe pero que merecen ser contadas.
10/10
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