lunes, 12 de septiembre de 2011

Mr. Monkey cree que Miss Bala debe ser la última película mexicana sobre el narco


El narco tráfico ha existido en México desde hace décadas pero en años recientes la situación se ha vuelto mucho más difícil. También en el cine, el tema del narco es tan usado como la Segunda Guerra Mundial en el cine gringo. Miss Bala, dirigida por Gerardo Naranjo y producida por los "Mexican Golden Boys" Gael García Bernal y Diego Luna, es el último intento a este cansado tema al mismo tiempo que es la más cruda de las visiones a este mal. 

Con una impresionante actuación de Stephanie Sigman como una chica de 23 años que solo quiere entrar al concurso de Nuestra Belleza Baja California pero termina enredada con un narcotraficante después de encontrarse en el lugar equivocado a la hora equivocada.


Es de todos conocido que el cine mexicano está en una falsa montaña de popularidad impulsada por escuelas de cine elitistas y medios de comunicación que aun no saben como manejar este negocio pero por cada película sobre sexo y chistes de pareja que logran hacer, hay una película independiente con un gran guión pero que parece estar filmada por amateurs en el medio y se atreven a llamarlo "metodo realista de cinematografía".

Tal es el caso de Miss Bala, cuyo guión me atrevo a poner dentro de los mejores de este año al mostrar de manera fluida la caída de una joven con grandes sueños para su pobre existencia que sin haberlo pedido termina en la gracia de uno de los principales narcotraficantes del norte del país. Es fascinante ver como aún con su poco carácter, este narcotraficante quiere hacerle favores a la chica que cariñosamente apoda "Canelita" pero ella, por el simple miedo de la gente con la que se ha metido, hace todo lo posible para no caer en sus garras.

La moraleja de la historia es algo confusa pues no queda bien establecido si es bueno apoyar al narco pues te cumplen tus sueños mientras los ayudes, o que el sistema está tan torcido que resulta lo mismo narco que policía o ejército y no debes pedir ayuda a nadie y menos ayudar a alguien.

La película se enfoca en el personaje de Stephanie Sigman lo cual no es una cosa sencilla pero esta desconocida (y poco agraciada) actriz logra cautivar a la audiencia que termina preocupandose por lo que se sucede con cada uno de sus tropiezos. Sé que sería algo casi imposible pero México debería impulsar a esta talentosa chica pues le veo mucho futuro.

Ahora hablemos un poco de la fotografía que en verdad es lo que baja muchos puntos de esta producción, unas decisiones estéticas muy pobres que no saben a donde deben dirigir la atención del espectador, la poca o casi nula iluminación, especialmente en las escenas nocturnas hacen tediosos momentos de gran tensión y la edición parece el resultado de comprar un programa de edición básica en Tepito y darselo a un niño de 12 años.

Una buena película que refleja la situación tan acentuada en nuestro país y que seguramente te dejará con miedo de aquellos que se dicen protectores de la sociedad, con carencias pero en especial espero que esta sea la última porque el tema está perdiendo fuerza en la pantalla grande.

9/10

I'm Out!!!!!!

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