domingo, 2 de enero de 2011

Mr. Monkey se pone de puntitas para aplaudir la perfección de Black Swan




Me subí al tren de fanatismo de Darren Aronofsky desde Requiem For A Dream, como la mayoría, pero a diferencia de los "conocedores" que la citan cada vez que quieren sentirse diferentes o filosóficos cuando hablan de cine, yo ya esperaba esta cinta desde que vi sus avances en internet y continúo siendo fiel seguidor del director aunque tenga películas que no vayan con el gusto de muchas personas (entiendase The Fountain). Esto no es para decir "Hey, soy mejor que tu" de ninguna manera, es solo para que de forma introductoria comente sobre la alegría que me ha dado ver la evolución de este director que con tan pocas películas ha logrado lo que muy pocos hacen y muchos sueñan.

Black Swan es la historia de Nina, una dedicada bailarina de ballet que lleva años tratando de mejorar su tecnica y obtener el papel principal dentro del grupo de ballet al que pertenece. Esto se logra cuando la prima ballerina es jubilada a la fuerza y el director decide darle una oportunidad a la joven Nina como la principal dentro de El Lago de los Cisnes, solo hay un problema, Nina convence como el cisne blanco pero carece de la sensualidad que requiere el cisne negro.


Este thriller con un giro de terror psicologico es un fantastico estudio de lo que el ser humano esta dispuesto a hacer para encontrar la perfección no solo en su labor sino en su vida, Aronofsky lleva a su personaje de la timidez al descubrimiento de su personalidad de las garras de su dominante madre (una bailarina que jamás consiguió ningún papel importante)

Natalie Portman jamas se ha visto mejor, actoralmente hablando, después de una carrera de papeles blandos desde su debut como Mathilda en The Professional y su pequeña participación en Heat, Portman no hay hecho mucho que valga la pena para colocarla como una actriz de éxito (las precuelas de Star Wars no cuentan por ser pésimas) pero por suerte Aronofsky vio algo en ella y al igual que su personaje, hace hasta lo imposible por romper con el estigma que es ser Amidala de Star Wars para darnos su segunda gran interpretación que seguramente la llevará de la mano al Oscar y a una plétora de mejores papeles.


La película te mantiene intrigado de principio a fin y el soundtrack de Clint Mansell ayuda a remarcar esa frialdad y rapido descenso a la locura con una versión moderna de los clásicos temas del Lago de los Cisnes. Aronofsky maravilla con tomas que hablan a veces más que los diálogos y nos cuentan de la soledad y a veces la crueldad de un mundo que muchos creen perfecto y armonioso.

Toda la rudeza y ese ambiente grotesco que percibíamos en The Wrestler es cambiado por delicadeza, frío y pasión humana que solo muestran otro paso en el crecimiento de este director que con pocas cintas ha logrado transformar el cine independiente.

10/10

I'm Out!!!!!

XTRA: Lo siento chicos, se me estaba olvidando que ESTO tambien pasa y wooow

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